Cuando negamos...

Si decís que no a alguna emoción, la estás negando, y si la negás no la aceptás.

¿Qué sucede cuando la manera de integrar y poder transformar algo es primero aceptarlo? ¿Qué sucede cuando eso que negamos igualmente es parte nuestra, de todos?

Si te digo: no pienses en un elefante rosa….. ¿qué pasa? A lo que resistes, persistes…dicen por ahí.

¿Qué pasa cuando decimos por ejemplo “No a la Violencia”, "No a las drogas", "No al Cáncer"?

Te cuento…. Lo reforzamos! El cerebro no registra el no, y se conecta sólo con esa parte de la energía, desde el miedo, y nos perdemos su aprendizaje.

El inconsciente funciona así, la mente funciona así…. Por lo menos por ahora, y desde lo que sabemos.

Tal vez en vez de negar que eso que vemos es parte nuestra, deberíamos ver para que lo podemos usar que sea más productivo, que queremos en lugar de eso, ver que nos sucede con eso, qué pasa que lo enjuiciamos como “negativo”, ¿no será que lo vemos negativo por precisamente lo negamos? Y de esa forma se reprime y cuando sale esa energía se manifiesta en forma destructiva.

Toda energía se puede usar para destruir o construir, depende de como la manifiestes, desde el amor o desde el miedo. Es cuestión de ver su esencia, integrarla y transformarla.

Por ejemplo: la envidia (que tan mala fama tiene), es la misma esencia que la admiración, y cual es el aprendizaje de cualquiera de las dos: me muestran cual podría ser mi deseo, me conectan con lo que me gustaría tener, o ser, o hacer.

¿Cuál es el aprendizaje entonces? Ver que tiene que ver eso con nosotros, y que nos pasa o pasó que lo negamos tanto. Si nos permitimos dejar de juzgar las emociones, nos muestran el camino a la sanación, a conectarnos con nuestro ser.

Fiorella Reiki 15/6/17